martes, 17 de julio de 2012

Escena de Ella es mía


En el interior no se oía nada, sintió frio y una sonrisa rompió la rigidez de su rostro. La ventana estaba abierta y la luna brillaba en todo su esplendor.  Se acercó al borde de la cama junto a su rostro y la vio dormida.

Sus dedos acariciaron la comisura de sus  labios, carnosos y sensuales.

Cuantas veces había deseado besarlos a lo largo de los años que llevaba guardando su oscuro secreto. Ya no recordaba ni un solo día en el que no hubiese sentido esa necesidad de ella. Sus dedos dibujaron la línea de cuello, deteniéndose donde su pulso latía, recordándole que vivía y lo cerca que había estado de la muerte.

Se apartó bruscamente de ella, como un muñeco impulsado por un resorte. La poca cordura que en aquellos momentos le quedaba le decía que no siguiera.

Luchaba, luchaba con todas sus fuerzas y aquello seguía creciendo en su interior. No podía, no podía controlar sus sentimientos, no podía apartar de su mente el cuerpo de Arabella, su cuerpo de mujer, ese cuerpo que le torturaba cada día, cada noche.

Sus manos, sin control, volvieron a su cuerpo, a rozar su cabello, sus labios. Solo quería besarlos, sentirlos junto a los suyos, lentamente se fue  acercando a ellos. Su cordura le decía que eso no estaba bien, su cuerpo ardiendo le pedía más. Rozó la miel… el cuerpo de Arabella tembló, el suelo bajo sus pies tembló. Se apartó de su lado, esperando impaciente, asustado por ser descubierto. Ella siguió durmiendo.

No podía, no podía detener sus manos. La presión en sus pantalones era insoportable y su cordura  había perdido la batalla.  Ahora era preso de la lujuria, solo obedecía a su entrepierna. Extendió la mano y la destapó. Se recreó en la visión que tenía ante él. Una diosa pelirroja de piel marfil, llenó sus pulmones con el olor a ella, siempre rosas y sándalo. Aquel aroma fue como elixir. Observó sus pies descalzos, tan pequeños, deseó tocarlos, besarlos. Sus piernas, tan largas, tan perfectas. El camisón dejaba ver más de lo que la decencia permitía, sus muslos le tentaban.

Extasiado, observó sus pechos elevarse con cada respiración. Inclinó la cabeza para ver  un poco más, pero el maldito camisón estaba abotonado  hasta el cuello. Volvió la mirada hacia los muslos. Su miembro palpitaba apretado, exigiéndole liberación. Colocó su mano sobre la parte interior del muslo y esperó. Arabella se movió al contacto pero no se despertó. Siguió con su mano el movimiento de la joven que se colocó bocarriba. Cuando la tranquilidad volvió al sueño de ella, él estaba con su mano entre sus muslos, tan cerca de su unión. Inspiró aliviado y triunfante. Con movimientos lentos, casi imperceptibles fue subiendo la mano, en una caricia que estaba haciéndole perder el juicio. Se detuvo unos segundos cuando rozó la suavidad de los vellos, pero ya no había vuelta atrás, necesitaba sentirla. Anhela el contacto, ansiaba tocar su esencia de mujer. Solo movió un dedo, solo un poco más cerca, el calor fue aumentando y sintió la humedad  de ella. Solo un roce,  y sintió temblar tanto el suelo a sus pies como el cuerpo de ella. Un temblor que instintivamente le hizo retirar la mano, y se maldijo cuando la hubo retirado. Ella dormía. Se llevó la mano a la boca, y se llenó del sabor más delicioso del mundo, su olor, su intimidad… y explotó. Su cuerpo tembló y su miembro se derramó.

Segundos después, su amiga la cordura volvió a llegar, aun tenía el sabor a ella en los labios, el olor en sus pulmones y el tamaño de su miembro amenazaba con volver a tomar el control, pero el miedo y la rabia empezaron a arraigarse en su cuerpo y salió despavorido de la habitación.


lunes, 16 de julio de 2012

Ella es mía en Amazon

"Ella es mía"

Hoy ha salido publicada en Amazon mi primera novela "Ella es mía" .
Quería poneros una bonita entrada pero es que las palabras no me salen. Los nervios no me dejan pensar. Mi cabecita está saturada de preguntas y de temores, mayormente de temores.
Poner tu manuscrito a disposición de todo el mundo es un gran paso. "Ella es mía" lleva en el cajón desde hace varios años y hasta este año no vio la luz. Los primeros pasos fueron colgarla en Wattpad donde los comentarios de las personas que la leyeron me animaron a ir un poco más allá y cometer la locura (porque no puedo calificarlo de otra cosa en estos momentos) de publicarla en formato digital.

He querido dedicarla a las personas que realmente me animaron y en un intento de no olvidar a nadie quizás haya olvidado mencionar a alguien detalladamente.

A mis  seguidoras de Wattpad,
 A las compañeras de ¿Escribimos..?
  y de Lectoras de romántica
 en Facebook,
cuyos comentarios me animaron a dar el paso.
Gracias por vuestro apoyo.


 Y olvidé mencionar que la portada me la hizo una amiga, Charo Arqued.

 En los próximos días, cuando mis nervios se calmen un poco os iré contando más sobre ella y sus personajes.


Espero que os guste y que disfruteis con ella tanto como ya escribiéndola.
Os dejo alguna de las escenas